La entrada de hoy no va de letras, sino de otra de mis grandes pasiones, que son los libros de ilustración. Y con esto inauguro una nueva sección del blog que espero os guste: máscaras de color.
Son muchos autores más o menos conocidos los que engrosan mis estanterías con sus imágenes, pero hoy en especial me gustaría hablar de una que descubrí por casualidad, gracias al regalo de una vieja amiga que conocía muy bien mis gustos.
Estoy hablando de la ilustradora italiana Nicoletta Ceccoli, que tiene varios títulos de personajes etéreos de rostros desproporcionados y ojos dulces, que siempre comparten una imaginación y una sensación onírica que a mi me encanta. Como veis sus trabajos comparten una tónica común con personajes melancólicos y pálidos que poseen una gran fuerza en sus miradas. Me recuerdan un poco a las muñecas pullip. ¿A vosotros?
Si vemos las imágenes que nos presenta Ceccoli es inevitable pensar en cuáles pueden haber sido sus influencias y a mi se me viene sin querer a la cabeza el imaginario del genial Mark Ryden, que seguramente habrá tenido que ver en sus creaciones. En un estilo más siniestro podríamos pensar en Ray Caesar, el ilustrador encargado de la imagen que utilizo de perfil en blogger.
Incluso podríamos ver un ligero aire común con el aclamadísimo Benjamin Lacombe, aunque éste último no lo veo tan claro.
Al fin y al cabo desde mi punto de vista los cuatro emplean esa esencia de belleza en el punto intermedio entre lo inocente y lo muchas veces grotesco, o extraño. Más lo primero en el caso de Ryden y Caesar (que igualmente adoro).
Sin más os dejo con unas cuantas maravillas de esta ilustradora de la que no tardando mucho me compraré algún libro. Por ahora se pueden encontrar dos obras ilustradas por ella en nuestro país: El mundo de las hadas y la Ladrona de lágrimas (la última tiene una pinta increible). De momento me conformo con ver su trabajo en mi marcapáginas favorito. Os invito a todos a que disfrutéis con las obras de estos artistas porque no os dejarán indiferentes.
Un beso!